Stromgarde

El reino de Stromgarde es una nación humana de las Tierras Altas de Arathi, en el mismo lugar de la capital original de Arathor, Strom. Durante la Segunda Guerra, Thoras Trollbane, señor de Stromgarde, se unió con su reino a la Alianza de Lordaeron. El reino decayó rápidamente tras la Tercera Guerra, perdiendo el control de una gran parte del territorio y de su capital. Su población actual se acerca escasamente a los 2000 habitantes.

Historia

La ciudad de Stromgarde fue fundada como Strom, durante las Guerras Troll, siendo después el hogar de la tribu Arathi que más tarde formarían los Reinos del Este. Fue entonces cuando pactaron el acuerdo con los altos elfos y aprendieron la magia, el primer paso hacia el expansionismo de la cuna de la humanidad.

La ciudad se convirtió en la capital del gran imperio de Arathor. Siguiendo el punto álgido del imperio, muchos de sus ciudadanos empezaron a fundar otras ciudades, incluyendo Dalaran, Gilneas, Boralus, Lordaeron y Ventormenta. Muchas de estas nuevas ciudades empezaron a atraer más pobladores a un ritmo asombroso, y solo fue cuestión de años que el poderoso imperio Arathi se dividiera en siete naciones humanas distintas. Strom ya no era el centro del mundo, y fue durante este tiempo que sus líderes cambiaron su nombre por Stromgarde.

Durante la Segunda Guerra, Stromgarde controlaba las Tierras Altas de Arathi y la fortaleza isleña de Tol Barad. Se unío sin demora a la Alianza de Lordaeron bajo el liderazgo del rey Terenas Menethil II, y estuvo involucrado en el esfuerzo militar para derrotar a los orcos y empujarlos de vuelta al Portal Oscuro. Stromgarde abandonó la Alianza poco después, disgustados por la decisión de Terenas de no ejecutar a los orcos capturados.

Durante los acontecimientos de la Tercera Guerra, Stromgarde logró evitar que el Azote atravesara sus tierras. A pesar de esto, la hora oscura de Stromgarde estaba por llegar. Lord Thoras Trollbane fue asesinado bajo misteriosas circunstancias, y Stromgarde fue asediada por el Sindicato y ogros Boulderfist. Las dos fuerzas lograron la victoria sobre el debilitado reino, y lograron ocupar gran parte de su territorio, incluyendo la capital.

Stromgarde aún existe, a pesar de su debilidad; su población y territorio han disminuido drásticamente. Jaina Valento logró convencer a un número de personas de Stromgarde para unirse a ella en el éxodo hacia Kalimdor durante la Tercera Guerra. Los ciudadanos de Stromgarde formaron la Liga de Arathor, que lucha por liberar el resto de las Tierras Altas de Arathi, la Cuenca de Arathi y sus muchos recursos, de las garras de los Rapiñadores Renegados. El príncipe Galen Trollbane, reconociendo los grandes cambios ocurridos desde la muerte de su padre y lo que vivió, estuvo de acuerdo en unirse de nuevo a la Alianza.

La esperanza que representaba Galen se desvaneció en cuanto los renegados atacaron y lo reanimaron como renegado. Para sorpresa y horror de todos, el nuevo Galen no-muerto se unió a la bandera de Sylvanas y reclamó la soberanía de Strom para los Renegados.

Las fuerzas restantes, ayudados por la Alianza y el Pacto de Plata, lucharon contra los Renegados por el control de Arathi, resultando en una victoria amarga y relativa. Aunque consiguieron mantener el dominio en la ciudad-forteleza, esta se encuentra en pésimas condiciones y la mitad de las tierras de arathi están contaminadas por la nueva plaga de los renegados.

Actualidad

Perdidos desde la muerte de Galen Trol'kalar, la ciudad fortaleza de Stromgarde acaba de empezar a recuperarse de sus infortunios perpetrados por el Sindicato y los Renegados. Recientemente su primo, el heroico y afamado Danath Dungalion ha regresado a su tierra natal y reclamado el título familiar para tomar los deberes de Protector de Strom, convertido así en señor de la Liga y las tierras de Arathi, un lugar agreste gobernado por pequeños señores feudales que llevan allí desde antes de la era imperial. Situación nada agradable, pues la insidiosa mano de la Real Sociedad ha contaminado parte de sus tierras.

Sociedad

La gente de Arathi es muy parecida a la de Lordaeron, pero aún mas tosca, vulgar y bastante bruta. Gente del monte recia y dura acostumbrada al frío de las tierras altas y bañarse en ríos gélidos. Mas corpulentos, aguerridos y altos, su acento es extremadamente marcado y poseen arcaísmos que lo acercan mas al danés que al germánico.

En Strom siempre han imperado las tradiciones marciales, es la cuna de los mejores guerreros humanos, feroces y capaces de sobreponerse al miedo. Sin embargo, dejan de lado su espíritu y en consecuencia, casi ningun arathiano desarrolla afinidades arcanas o artísticas.

Los arathianos y sus costumbres han empezado a perderse, relegados al pasado y a las historias épicas. La realidad del presente, son en su mayoría exiliados que intentan ganarse la vida o un lugar en cualquiera de las otras naciones humanas. Prácticamente no quedan ciudadanos en Arathi y los que se han quedado allí, forman parte de la resistencia, demasiado ocupados en la guerra y en recuperar un resquicio de lo que otrora fue.